COMER Y JUGAR A COMER

¿A comer se aprende?

Durante la infancia se establecen los hábitos alimentarios que posteriormente serán difíciles de cambiar. Con hábitos adecuados en la alimentación y en el estilo de vida, contribuimos de forma positiva en la construcción y modelado de nuestro cuerpo y en la mejora de nuestra salud, rendimiento físico e intelectual.

El acto de comer es, además de un acto de necesidad vital, un acto social, de juego y aprendizaje en que el niño se comunica con los otros y consigo mismo debiendo estar SIEMPRE activo e inmerso en lo que está haciendo.

Cuando comemos nos estamos relacionando con los alimentos (con su forma, su olor, su textura, su sabor…) y no sólo con los alimentos que comemos sino también con el ambiente que, en el acto de comer nos envuelve (como está puesta la mesa, como se come este alimento ¿Qué hago después?…)

Comer no es sólo alimentar mi cuerpo, es alimentar mi identidad «¿Me gusta lo que como? «

Es desarrollar mi destreza y mi autonomía (Utilización de utensilios)

Es comunicarme y madurar mi lenguaje «¿Cómo se llama lo que voy a comer?«

Es convivir en sociedad (normas de convivencia)

Es adquirir procedimientos que acentúan la confianza en mí mismo (poner y quitar la mesa)

Es otorgar valor y significado a lo que hago (esto es bueno para mí)

En la escuela el acto de ir a comer es un momento más de aprendizaje inmerso en nuestra rutina diaria. Vemos lo que comemos y siendo conscientes y protagonistas de nuestra alimentación desarrollamos habilidades y generamos hábitos que nos ayudan a ser lo que somos.

Por lo que… ¿Somos lo que comemos?

… y es entonces cuando se convierte en un hecho estético, un «jugar a comer», un «representar la comida» que forma necesariamente parte del desarrollo íntegro de nuestra persona.

Fragmento extraído del capitulo 28

Gramática de la fantasía

Gianni Rodari

Alumnos/as de 3 años

AMIGO ¿VIENES CONMIGO?

¿Crees que es importante pasar tiempo con otros? ¿O es mejor estar solo?

A mí me gusta estar con mi madre y también con mi padre y mi teta (Lara)

Sí, pero yo tengo primos y cuando estoy con mis primos a mí me gusta (Manel)

A mí me gusta estar solo pero todo el rato solo, eso no me gusta (Víktor)

Si estás con un amigo puedes ayudarle a ponerse los zapatos (Carla)

Yo veo el cuento con mi mamá (Olivia)

Pero yo me lavo las manos y eso ya lo hago solito (Mateo)

(…)

Durante este tiempo hemos ido descubriendo aspectos sobre la vida de nuestro amigo Conrado. Y nos hemos dado cuenta de que, al igual que para nosotros es importante la socialización (estar con otros), también lo es para él. Hemos leído que hay peces que entristecen cuando están solos y viven más felices si están en grupo.

Por esta razón decidimos, hace un par de semanas, que era muy buena idea ir en busca de nuevos amigos para él. Comenzamos a trabajar recogiendo información acerca de la socialización de los peces. Anotamos la información importante y después de realizar varios descubrimientos, estábamos preparados.

Por eso esta semana ha sido especial: ¡NOS HEMOS IDO EN BUSCA DE PECES!

Muy emocionados hemos llegado a un comercio donde habían muchos acuarios con muchos, muchos peces diferentes.

Lo primero que hemos hecho ha sido observar con mucha atención todo el lugar. Hemos podido ver las diferencias entre las especies, plantas acuáticas, caracolas, gambas…

Después de observar con atención cada acuario y a sus habitantes, debíamos decidir qué pez era el más apropiado para vivir junto a Conrado.

Le hemos explicado al señor especialista en peces que nuestro amigo es de color blanco con una manchita naranja en la cabeza, que tiene en su acuario agua fría y no caliente y que es agua dulce y no salada.

El señor nos ha explicado que hay peces que nadan muy rápido y otros que nadan más despacio y no pueden vivir juntos porque unos (los más rápidos) le quitarían la comida a otros (los más lentos).

Conrado es buen nadador pero no es de los más rápidos, así que finalmente decidimos quienes serían los mejores amigos para él.

Y así hemos visto cómo el señor sacaba, con una red, dos peces preciosos: uno de color negro con ojos enormes y otro de color naranja con una mancha negra en la cola.

Y preparados para su viaje a casa.

Ya sabíamos como introducir peces en un acuario (no era la primera vez) así que, al llegar a la escuela lo hicimos con mucho cuidado.

CONRADO SE HA ENAMORADO,

Y VA DE LADO A LADO.

NADA CON ROBERTA,

QUE SIEMPRE ESTÁ DESPIERTA.

EN CAMBIO, MANOLO

PREFIERE NADAR SOLO.

SUBE ARRIBA,

COME BURBUJAS

Y ALETEA FUERTE SI LO DIBUJAS.

Y AHORA QUE ESTÁS CONMIGO ¿QUIERES SER MI AMIGO?

Alumnos/as de 3 años

EL DÍA Y LA NOCHE

¿Todos los seres vivos necesitamos luz? ¿Y oscuridad? ¿Cómo influye el ciclo día/noche en nuestra vida diaria?

Esta semana en la escuela hemos hablado sobre nuestras rutinas diarias y hemos coincidido en algo: todos estamos despiertos durante el día y dormimos durante la noche.

Este ciclo es inevitable y necesario para nosotros, las personas. Pero… ¿Es para todos los seres vivos de la misma manera?

Hemos observado a Conrado durante este tiempo y nos hemos dado cuenta de que… ¡Nunca lo hemos visto dormir! ¿Será que los peces no duermen?

En absoluto, duermen pero lo hacen de una manera muy diferente a la nuestra. Conrado, como la mayoría de los peces, descansa dejando de nadar o reduciendo su actividad metabólica. Sabemos que Conrado descansa porque lo vemos en algún rincón, entre rocas o algún lugar resguardado.

Además, hemos descubierto que Conrado al igual que nosotros, necesita luz y oscuridad (día/noche) para su correcto desarrollo y crecimiento. Para que disponga de la luz necesaria que le ayuda a orientarse y a crecer sano, hemos colocado una lámpara de luz blanca que encendemos por la mañana y apagamos cuando nos vamos a casa.

También, esta lámpara proporciona colores realistas que nos permiten observar el acuario real, claro y completo.

La observación es una herramienta indispensable de aprendizaje, ya que nos permite obtener información de un contexto determinado, interpretarla, establecer relaciones, generar hipótesis y, finalmente, obtener conclusiones.

Mirar es prestar atención

Mirar es observar

Mirar es ser consciente de los pequeños detalles

Mirar es aprender

Mirar no es lo mismo que ver

Alumnos/as de 3 años.

EL PAREADO

El pareado es una estrofa que cuenta con tan solo dos versos que riman entre sí. En la escuela jugamos constantemente con el lenguaje: lo producimos, lo rimamos y lo cantamos para así, componer y descomponer palabras, memorizar textos o fragmentos y, en definitiva, ejercitar nuestra conciencia fonológica.

Cuaderno colectivo «ENTRE NIÑOS Y PECES»

LARA Y SU PEZ,

COMEN UNA NUEZ.

VALERIA TIENE FLORES,

QUE SON DE COLORES.

VIKTOR Y SU PEZ,

NADAN A LA VEZ.

CARLA EN EL RÍO,

NUNCA TIENE FRÍO.

AINA EN SU TERRAZA,

A SU PEZ ABRAZA.

FERRÁN EN EL SALÓN,

COME SALMÓN.

OLIVIA EN EL MERCADO,

COMPRA UN PESCADO.

MÁXIMO EN LA ARENA,

BUSCA UNA SIRENA.

MANEL EN LA MONTAÑA,

BUSCA UNA PIRAÑA.

GALA EN SU SILLA,

ESTÁ DE MARAVILLA.

LUCÍA EN LA PLAZA,

COMPRA CALABAZA.

CARMEN Y SU PEZ ROSA,

BUSCAN MARIPOSAS.

DIEGO EN SU LIMONERO,

JUEGA EL DÍA ENTERO.

EL PEZ DE MATEO,

SE ESCONDE Y NO LO VEO.

MARLA Y SUS LUNARES,

BUSCAN CALAMARES.

EL PEZ DE CHIARA,

EN EL BOSQUE PARA.

GABRIEL Y SU PEZ,

JUEGAN A LA VEZ.

SASHA Y SU DELFÍN,

JUEGAN EN EL JARDÍN.

Alumnos/as de 3 años.